Los resultados de los estudios comisionados por la Fundación Triple S, resaltan datos clave para crear políticas públicas e intervenciones específicas
San Juan, Puerto Rico – Por primera vez en Puerto Rico, se llevó a cabo un análisis del aislamiento social y la soledad a través de dos estudios comisionados por la Fundación Triple-S. Los hallazgos, presentados recientemente, revelan datos cruciales sobre estas problemáticas y su impacto en la salud física y mental de los puertorriqueños.
La Fundación Triple-S comisionó la integración de módulos sobre aislamiento social y soledad a dos encuestas ya existentes en Puerto Rico: la Consulta Juvenil de la Administración de Servicios de Salud Mental y contra la Adicción (ASSMCA) y el Behavioral Risk Factor Surveillance System del Departamento de Salud.
Según la Dra. Ruby Serrano, investigadora principal de este último estudio, “el aislamiento social y la soledad son problemas de salud pública con implicaciones directas en el bienestar físico y mental. Este análisis nos permite identificar a los grupos más vulnerables y aportar datos clave para desarrollar políticas públicas e intervenciones que promuevan el bienestar de la población”.
Hallazgos Claves por Grupos y Regiones
Uno de los descubrimientos más sobresalientes fue que el grupo de 55 a 65 años presentó el nivel más alto de aislamiento social, con un 9.1%, desafiando la creencia común de que este problema afecta primordialmente a las personas mayores de 65 años.
Por otra parte, las regiones de Arecibo y Bayamón registraron los índices más altos de aislamiento social, con un 8.7% y 8.5%, respectivamente.
En cuanto a la soledad, el 10.2% de los encuestados reportó niveles severos, destacándose las regiones de Bayamón y Ponce como las más afectadas. Además, las personas con menores ingresos y menor nivel educativo mostraron una mayor incidencia tanto de aislamiento como de soledad.
“Estos resultados nos alertan sobre la urgencia de intervenir en comunidades vulnerables, especialmente en las áreas con mayores índices de aislamiento y soledad. No es solo un tema social o emocional, sino una cuestión que impacta directamente la salud general del paciente”, afirmó el Dr. José Novoa, miembro de la junta de la Fundación Triple-S.
Implicaciones en la Salud y Próximos Pasos
La Dra. Serrano subrayó que el aislamiento social y la soledad están relacionados con un mayor riesgo de enfermedades crónicas, deterioro cognitivo y mortalidad prematura.
“La combinación de factores como el envejecimiento poblacional, los desafíos económicos y los desastres naturales recientes hacen que este análisis sea particularmente relevante en Puerto Rico”, añadió.
El Dr. Novoa destacó que estos resultados no solo buscan comprender la problemática, sino también impulsar cambios estructurales.
“Es un llamado a la acción para desarrollar programas que fortalezcan las redes de apoyo, promuevan conexiones sociales y reduzcan la carga que estas condiciones ejercen sobre nuestra población”, enfatizó el galeno.
La Fundación Triple-S reafirmó su compromiso de continuar monitoreando estos indicadores para evaluar el impacto de futuras intervenciones y garantizar un enfoque más integral en la atención a la salud en Puerto Rico.